Señor Presidente
Señoras y señores Diputados
Pueblo costarricense
Amigos y amigas de la prensa
Inicia el último año de nuestra legislatura, el cual se incrusta en el camino de una nueva campaña electoral, y, dada su trascendencia, impone nuevos retos a nuestra labor de cara los más altos intereses del país.
El Partido Movimiento Libertario ha tenido en este Plenario Legislativo una representación digna y coherente, trabajadora y muy responsable, siempre atenta a las demandas de transparencia y oportuna labor para el mejoramiento de las mayorías.
Los costarricenses que confiaron sus votos a nuestro Partido, pueden sentirse satisfechos de los logros alcanzados, y de la respuesta que todos y cada uno de los y las congresistas de nuestra bancada, hemos otorgado.
La lucha ha sido ardua…Hemos tenido que batallar en medio de las aguas tormentosas de la falta de acuerdos transparentes, la persistente praxis de clientelismo político, al parecer irrenunciable por los partidos tradicionales, la incoherencia entre el decir y hacer de muchas ofertas, y la inmensa pared que ha representado un Poder Ejecutivo ineficiente, errático, sin rumbo y muchas veces, ciego, sordo y mudo.
Un Partido comprometido
Somos, los libertarios, una organización política que nació a la luz pública para combatir el chorizo y las añejas prácticas electorales y politiqueras, que lesiona la credibilidad en la democracia, el ánimo sobre el electorado y la credibilidad de nuestras instituciones.
Somos un Partido comprometido con los más altos ideales del pueblo costarricense, sometidos a la batalla permanente por acrecentar la libertad individual y colectiva, las oportunidades laborales para todos, el libre comercio, y la batalla sin fin contra las amenazas de impuestos que, un gobierno sí y otro también, lanzan en contra de los trabajadores y emprendedores, para satisfacer el apetito insaciable de despilfarro de los políticos de siempre.
Hemos laborado, lo hacemos y continuaremos haciéndolo, para garantizar una educación pública de calidad, un acceso decente a la salud pública, la desburocratización del aparato estatal que inhibe el crecimiento económico, y, principalmente, el señalamiento mediante el control político de todas aquellas acciones que desde Casa Presidencial, o de este mismo Parlamento, quieran llevar adelante para dañar a nuestra querida Costa Rica.
Nuestro compromiso no sopesa cálculos electorales baratos: establece parámetros de acción responsables que apuntan al desarrollo y progreso de un país como el nuestro tan lastimado por acciones irresponsables, malos manejos, y actos de corrupción permanentes.
El Partido Movimiento Libertario levanta la bandera de la justicia social, no con poses demagógicas, no con acuerdos oscuros, no con discursos vacíos, sino con labor permanente de fiscalización sobre los recursos del Estado y la modernización de éste, requerida en un ámbito mundial de progreso, globalización y competencia.
El bipartidismo es cosa del pasado
La sociedad costarricense ha evolucionado en su pensamiento político, y en el lapso de una década, desterró el bipartidismo como forma de organización política.
Se dio cuenta el pueblo, que otorgando su representación a dos grandes bloques, que al final venían a ser uno solo, condenaban la institucionalidad democrática a ponerse los grilletes de la vergüenza, la esclavitud de las ideas, y la banalización de los principios loables.
No hay marcha atrás. El soberano desea que la multi formación del Parlamento siga siendo una realidad en el país.
El panorama variopinto que exhibe el Primer Poder de la República señala, inequívocamente, que la ciudadanía no confía en el bipartidismo, porque las experiencias han sido, amargas y decepcionantes.
Los alaridos de los dinosaurios de la política que invocan el regreso del pasado, se pierden en la llanura de un pueblo que entendió que ese no era el camino, rectificando hacia un prorrateo del poder que garantice equidad y equilibrio en la representación popular.
No hubiera querido imaginar, cuál hubiese sido el fin de “la Trocha y de OAS”, sin la presencia de muchos partidos políticos, no dispuestos a permitir esta charanga de acciones gubernamentales, a costa del dinero de todos los costarricenses.
Solo dos ejemplos cito, pero podría extender mi lista hasta el infinito.
Un compromiso con la producción
Nuestro Partido, por medio de su bancada legislativa, mantiene un compromiso inclaudicable con el sector productivo de la nación, el cual, ha sido lastimado y deteriorado por las políticas incoherentes de las últimas administraciones.
Contrario a la demagógica propaganda del actual gobierno, financiada con cientos de millones de colones de todos los ticos, para diz que “levantarle la imagen” a la presidenta, olvidándose que el ultimo muerto en caminar fue Lázaro el de Betania, hoy más que nunca el desempleo está creciendo.
Es muy peligroso para la vida institucional, que sean miles de jóvenes los que se egresan de las universidades, y con su título bajo el brazo, se encuentran sumidos en la fosa del desempleo y la falta de oportunidades.
Producir riqueza en Costa Rica es un reto enorme para los inversionistas micro, pequeños, medianos o grandes.
La marea de requisitos, trámites, papeleo, restricciones, impuestos, gravámenes e inconvenientes que el Estado dispara hace casi que milagrosa la permanencia y éxito de empresas y negocios.
Sin educación no hay desarrollo
El modelo educativo costarricense sigue anclado en los paradigmas de antaño, y no permite despertar las conciencias de las nuevas generaciones.
Si no fuera por la incesante labor de control político, las ponencias de las fuerzas opositoras, aun seguirían leyendo “Paco y Lola”, nuestros niños y niñas.
Un ejemplo demoledor de la fragilidad de ese sistema educativo se muestra en su enorme déficit para hacerse INCLUSIVO.
La población autista y asperger, son ejemplos de esa política de exclusión del sistema educativo.
No son dos ni tres, son cientos los testimonios de madres y padres de familia que han acudido a mi despacho legislativo, para denunciar y pedir ayuda porque sus hijos que sufren estas patologías, son rechazados por el modelo.
La infraestructura educativa es desastrosa. Nuestro Partido presentó un proyecto de ley para simplificar los requisitos para la construcción y acreditación de centros
Educativos, en particular eliminando la solicitud de valoración de planos e infraestructura ante la Dirección de Infraestructura y Equipamiento Educativo (DIEE) del Ministerio de Educación Pública. No hemos sido escuchados.
No pueden acusarnos de obstrucción. Hemos votado los proyectos aquí presentados para el mejoramiento de le educación nacional, incluyendo un multimillonario préstamo para infraestructura educativa, del cual estaremos vigilantes, no se vaya a ir esa millonada por el desagüe de las consultorías y negocios con los amigotes del gobierno.
Debe despolitizarse la CCSS El reto más grande que tenemos como diputados y diputadas del Partido Movimiento Libertario es luchar en este año que nos resta, por presionar para que se despolitice nuestra querida Caja Costarricense del Seguro Social.
El anterior gobierno liberacionista, y el presente, han llevado al abismo de la quiebra a la más emblemática de nuestras instituciones, poniendo en grave riesgo el sistema de pensiones y la atención de salud pública.
NO ES POSIBLE QUE LOS RESPONSABLES ANDEN TRANQUILOS Y LO PEOR, ALGUNOS FUNGIENDO EN LA ADMINISTRACIÒN PÙBLICA.
Es urgente, impostergable, decisivo, recuperar los derechos de los asegurados a una atención oportuna y de calidad a través de la modernización del modelo de atención de la CCSS “puesto que, es un imperativo constitucional que los servicios de salud pública sean prestados de forma eficiente, eficaz, continua, regular y célere” según reza el Voto N°0003-2006 de la Sala Constitucional.
El Congreso no es culpable de la ingobernabilidad.
Los responsables del Poder Ejecutivo han encontrado el fácil camino de culpar a los y las diputadas de su incapacidad, inoperancia y falta de aptitud.
Les queda cómodo, decirle a la opinión pública que, las cosas en el país no caminan por culpa de los congresistas, y esta mentira, del tamaño del Chirripò debe ser desbaratada y que la verdad salga a la luz. Las grandes decisiones y obras son resorte exclusivo de la Casa Presidencial.
Este pésimo gobierno ha sido errático desde el inicio, ha mostrado una soberbia descomunal y lo peor, una miopía por no decir ceguera, en el trato con la oposición.
Y que se den de golpes en el pecho con la piedra de Aserrì, que los y las diputadas opositoras, en su gran mayoría, hemos sido cooperantes al aprobarle las leyes que ha solicitado, los empréstitos que alega requerir, y le hemos abierto las puertas del diálogo permanente, aunque muchas veces, Zapote ha cerrado esas puertas y con violencia.
Ha sido, la falta de liderazgo, la errática política económica, la descoordinación ministerial, la falta de tacto político, el incumplimiento casi generalizado de promesas de campaña, lo que ha llevado a esta administración a pasar por la mas mala de la historia, y que la imagen de la señora Presidenta se hunda con la fuerza del Titanic.
No ha sido esta bancada libertaria la culpable. Nada más lejos de la verdad. Esta bancada ha sido propositiva, seria, formal y coherente en su compromiso con el país. Muchas gracias.
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